martes, 15 de enero de 2008

Jugando al pillar

El lunes empezó regular porque tuve que ir a la guardería y, la verdad, no tenía nada de ganas. Además estaba lloviendo, lo que significa que no saldremos al patio, lo cual lo hace aún peor. En fin. Cosas que tiene ser ya mayor. De la guardería nos fuimos a casa de los abuelos Pepi y Miguel, comimos allí, bueno yo lo hice en la guardería. Me quedé toda la tarde jugando con los abuelos porque tanto papi como mami tenían que trabajar por la tarde. A media tarde, mientras yo dormía la siesta llegó mi prima Natalia. En cuanto la escuché pegué un salto en la cuna.

Con la prima tengo asegurada la diversión, jugamos al escondite. Yo cuento: 3, 5, 1 , 3, 6. Y seguidamente digo: voy. Pero lo que más me gusta es jugar al pillar. ¡Jo que divertido! Me lo estaba pasando tan bien que cuando sonó el timbre y vi que eran mis padres no me hizo ninguna gracia. Empecé a gritar: no quiero, yo aquí, no quiero casa. Pero normalmente no hay nada que hacer, mis padres no me hacen caso y nos fuimos.

En la casa estaban todos mis juguetes esperándome para jugar. Después de un rato tocó el baño, el biberón y a dormir, pero ayer mientras papi y yo veíamos los resúmenes deportivos sonó el teléfono. Papi se tuvo que ir corriendo porque el abuelo Miguel se puso malito. Tenía un ojo muy muy hinchado. Así que fueron al hospital. Yo me quedé con mami que me lo contó todo. Yo le preguntaba: ¿la abuela Pepi malita también? Y me dijo que no. Menos mal, pensé yo, porque si no quién iba a cuidar del abuelito.

Además tita Cristina también está malita, la pobre. Parece que ya está recuperando, veremos. Ánimo. ¡Recupérate pronto abuelito! ¡Recupérate pronto Cristina! Luego me dormí y no sé que pasó más.

1 comentario:

Unknown dijo...

Hola Sofía!

Así que ya sabes jugar al escondite... jajajaja!!! Habría que verte. En fin, lo más importnate ahora es que ni tu abuelito ni tu tita Cristina tengan nada importante, se les pase enseguida y puedfan jugar tanto como siempre contigo, que les encanta.

desde aquí, ánimo para ambos y que os recuperéis rapidamente, que os queremos sanitos sanitos.

Besos