domingo, 14 de septiembre de 2014

En Grazalema

Nada más comenzar agosto, el primer día del mes, nos fuimos de casa a pasar tres noches juntos con nuestros amigos Dani, Jaime, Gabriel, Sagrario y Miguel a Grazalema. El año pasado y el anterior fuimos a El Bosque, pero este año para variar fuimos a Grazalema. 

Según dicen nuestros padres la idea es comer bien y descansar mejor, y en Grazalema, si vas de vacaciones, se puede hacer todo eso perfectamente. En el hotel al que fuimos había una piscina y estuvimos en unos apartamentos de dos plantas, uno para cada familia.

Una de las cosas más impresionantes que tiene Grazalema son las vistas. Cerca del centro del pueblo se puede uno dirigir al asomadero, que es una especie de mirador o balcón, y que tiene una vista amplia hacia la sierra y está chulísima. A mi hermano Miguel y a Jaime les gustaba más tirar piedras hacia el barranco que disfrutar de las vistas, pero bueno, ellos ya se sabe que no están mucho tiempo quietos para contemplaciones.

Desde la ladera de una montaña en los alrededores de Grazalema, donde estaba la villa turística donde nosotros estábamos quedándonos, también había una vista preciosa hacia el pueblo. A mí me encantaba quedarme mirando un buen rato, sobre todo para descansar un momento después de subir la escalera de noventa y muchos escalones, que cada día subíamos en más de una, de dos y de tres ocasiones.


Pd: Hoy es el cumpleaños de mamá y desde aquí le mandamos otro grandísimo beso.¡Felicidades mamá!

domingo, 7 de septiembre de 2014

Casualidades

Al día siguiente del bautizo de nuestras primas Laura y Martina fuimos a la playa para descansar y recuperar fuerzas, y por casualidad en la playa nos encontramos con nuestra prima Natalia y nuestros titos Ana y Paco. ¿No es una casualidad estupenda? ¡Lo pasamos genial! Especialmente yo, que me encanta jugar con mi prima Natalia.

Mi hermano también se lo pasó bien, pero él lo pasa mejor cuando va Daniel, que es con el que juega más, pero no importó y lo pasamos genial. Estuvimos juntos hasta que llegó la hora de comer, porque nosotros teníamos previsto ir a tomar sardinas al chiringuito y nuestros titos y Natalia pensaban comer en casa, de manera que se quedaron en la playa mientras nosotros nos fuimos al chiringuito. Pero no importó, porque también nos gusta mucho las sardinas. ¡Otro día quizá!



Pd: Hoy es el cumpleaños de mi abuelito Miguel. ¡74 años! ¡Un beso muy fuerte para él!
 

lunes, 1 de septiembre de 2014

Bautizando a Laura y Martina

Al día siguiente del enlace del abuelo Miguel y Rosa se bautizaron nuestras primas Laura y Martina. Como se llevan entre ellas tan poquito tiempo, sus padres quisieron realizar la celebración todos juntos, para lo que mis padres llaman matar dos pájaros de un tiro.

Hacía un día perfecto, con un cielo despejado completamente aunque con un sol de aquí te espero. Durante el bautizo las dos se portaron más que bien y ni siquiera lloraron cuando se les echó el agua por la cabeza. Después del bautizo, que se celebró en la parroquia del Carmen, nos quedamos un rato en el bar que hay situado dentro del mismo parque, pero no estuvimos mucho porque hacía mucho calor para estar en una terraza. Todos deseábamos estar en un lugar con aire acondicionado.

Así que nos dirigimos al lugar de la celebración donde ya pasamos el resto del día. Allí lo pasamos de lo lindo, especialmente yo que me lo pasé todo el rato jugando con unos y con otros. A veces con Blanca, otras veces con Lucas, otras con las recién bautizadas o con Celia. Con el que menos juego en realidad en estos sitios es con mi hermano Miguel, pues como con él estoy todo el día, en ese momento casi que prefiero jugar con alguien distinto.