No me van los...

Todos pensáis que me gusta una amplia variedad de comida, y es bastante cierto, pero tengo mis cosillas, mis pequeñas debilidades. Me encantan el biberón, los gusanitos, los guisantes, el chocolate, el lenguado, el queso, el pan con mantequilla... y la verdad, casi todo, pero hay algunas comidas que simplemente no son lo mío. No están hechas para mí. Por ejemplo los espárragos. No me van. Pongo una cara de asco que buaahh. Con sólo pensarlo se me quitan las ganas de comer. Escucho a papi decir la palabra y le digo: "Que no, que no, que no" y como a veces no me entiende, también se lo digo con el dedo.

No tengo mucho que contar de lo que he hecho últimamente porque he estado bastante ocupada con todas mis tareas. Entre la guardería, cuidar de mis muñecos, hacerles de comer en la cocinita que tengo en el salón, dar paseos por la casa a los bebés en el carrito es agotador y limpiar los cristales con las toallitas aún más. Menos mal que mami me ayuda.

Sigo teniendo mocos casi todo el día, pero están bastante controlados. Cuando me tapan la respiración por la nariz, me meto el dedo en la nariz y los saco para fuera. Como veis tengo todo controlado.

Los lunes son duros

Los lunes son duros es algo que ya empiezo a compartir con la mayoría de los mortales. La prueba es que el lunes cuando mis padres vinieron a recogerme a la guardería estaba dormida. Como una marmota. Totalmente KO. Me senté en una silla y me quedé sopa. Cuando desperté estaba en la cuna de mi casa y no sabía bien donde estaba. ¡Jo! Es que estaba agotadísima. La realidad es que tuve un fin de semana tan intenso y el domingo me acosté algo más tarde de lo habitual y como últimamente no duermo tan bien debido a que tengo muchos mocos, pues claro. Pasó lo que tenía que pasar.

Menos mal que por la tarde estuve todo el rato con mi madre en casa, las dos tranquilitas. En realidad la única que descansé fui yo porque mami no paró de hacer cosas en toda la tarde. Las dos estábamos deseando que llegara papi, que había ido a trabajar. Por fin llegó y entre los dos me dieron un baño, después mami me dio la cena y papá el biberón y las medicinas. Estuvimos viendo un poquito la tele él y yo mientras mami se duchaba y ya no me acuerdo de más...

Entre cientos de gatos

El domingo fue un día realmente extraordinario. Me desperté bastante tempranito y mis padres me llevaron a la cama con ellos donde me dieron el biberón. Como todavía estaba un poco cansada me volví a dormir en la cama con ellos. Un rato después de despertarnos por segunda vez, vinieron a visitarnos Lidia con mi amiguita Elena, que aunque estaba dormida, todas juntas nos fuimos al parque que hay junto a mi casa, mientras mi papi se quedó viendo un partido del Málaga en la tele (Salamanca 0 - Málaga 0).

También vino con nosotras mis abuelos Pepi y Miguel y además vinieron con mi primita Natalia. Nos lo pasamos muy bien jugando en el parque, pero lo que no me esperaba, y fue una agradable sorpresa, es que nos fuimos juntos a ver una exposición de gatos que había en el Palacio de la Paz. ¡Jo! Había por lo menos cien gatos, de todos los colores y tamaños. Me gustó mucho. Desde allí volvimos a casa y volvimos a ir al parque donde ahora sí vino papi. Después todos se fueron y mis padres y yo nos volvimos a la casa a almorzar. Qué hambre tenía. Me eché una siesta y me pasé toda la tarde jugando con mis padres en casa.

Por la noche vinieron mis titos Cristina y David a ver un partido de fútbol que había en la tele, bueno también vinieron a verme a mí. Todos pidieron comida china y yo me comí pan de gambas y muchos guisantes, que son mi plato favorito. Aunque también me empieza a gusta el arroz. Me encanta comer comida que trae el chino.

Con mucho moco

El sábado empezó como ya sabéis -si habéis leído el post anterior- en la cuna, pero no había guardería así que me quedé en casa, mami me dio el biberón mientras papi fue a por el pan que estaba buenísimo. Desayunamos los tres juntos sentados en la cocina. Después nos fuimos al parque que hay junto a la casa. Ya he aprendido a subir los escalones yo sola y después tirarme. Me encanta.

Desde el parque, camino de la casa de los abuelos Pepi y Miguel fuimos a echar la quiniela, que dice papi que si le toca me compra un paquete de gusanitos. Ojalá le toque. Llegamos a casa de los abuelos, donde me quedé jugando mientras mis padres se iban a almorzar con unos amigos. Así yo me quedaba allí, que en realidad lo prefiero porque me encanta jugar con Natalia. Y estaba apunto de llegar.

Por la tarde, cuando yo llevaba mucho tiempo jugando con la prima llegaron mis padres a recogerme, yo no me quería ir pero como no se hace casi nunca lo que yo quiero pues nos fuimos. De todas formas en el fondo tenía ganas de irme ya porque estaba muy cansada y respiraba muy mal porque tengo muchos mocos. Mi mami dice que tengo algunas décimas de fiebre y que por eso me dieron una medicina. Me quedé casi toda la tarde con ellos en el sofá viendo el vídeo del día me mi bautizo. Me encanta verme aunque no me reconozco.

Estuvimos toda la tarde holgazaneando en el sofá hasta que me entró el hambre y el sueño. Y mi papi me dio un beso de buenas noches en la frente y cerré los ojos irremediablemente hasta el día siguiente.

Durmiendo en el sofá pero...

El viernes después de la guardería, cuando mis padres me recogieron, nos fuimos a la casa, yo directa a la cuna ellos directos a hacer la comida. Una hora y media más tarde cuando desperté papi y mami estaban preparados para irse a la calle, así que me vistieron y nos fuimos a casa de la abuela Pepa. Mis padres fueron al cine y yo me lo pasé en grande con mi abuelos y con Cristina y David que también estaban allí. Claro, sabían que yo iba a estar allí y me esperaron. Gracias.

Pasé un día muy bueno con todos, me bañó la abuela, y también me dio de cenar. Me lo pasé en grande allí. Cuando mis padres vinieron a recogerme, bien tarde, ya estaba dormida. Yo no sabía que me recogían así que yo me dormí en el sofá junto a los abuelos pero me desperté a la mañana siguiente en la cuna de mi casa. Sorpresas te da la vida.

Celebrando el cumple de tito Francisco

El miércoles después de la guardería cuando llegué a casa me eché una siesta bien buena. Cuando desperté estaba en casa Luba, que había venido a limpiar. Mi mami me dio la merienda y me pasé toda la tarde dando vueltas por la casa, con todos mis juguetes. Nos dimos maá prisa de lo normal porque mami y yo debíamos estar preparadas para cuando volviese papi de trabajar, porque no teníamos que ir a casa de los titos Mª José y Francisco a celebrar su cumpleaños.

Así que cuando por fin papi llegó, nos fuimos directamente a casa de los titos, allí estaban los abuelos Pepa y Felipe además de Cristina, David, Mª José y Francisco poco después de nosotros llegaron Rosi y Chiqui. Todos estaban muy contentos porque los titos nos habían preparado una gran comilona, todos nos pusimos las botas, sobre todo papi. Yo me senté entre Chiqui y Francisco, y se encargaron de darme de comer un montón de cosas, especialmente jamón. Que luego me llevé algo para casa.

Cuando llegó el momento de la tarta y las velas todos empezaron a cantar cumpleaños feliz y a mi me dio por llorar, no sé bien por qué, será que aún no controlo mis sentimientos. Pero bueno, al final nos lo pasamos muy bien todos. Ya estoy deseando que el tito Francisco cumpla otra vez. Espero que sea pronto.

Feliz Cumpleaños Francisco

Hoy es el cumpleaños de tito Francisco y aprovecho desde aquí para felicitarle y desearle que se lo pase estupendamente y que reciba muuuuchos regalos para jugar. Un muac muy muy grande y que cumplas muchos más.

¡¡Feliz cumpleaños Tito!!

Mis gafas nuevas

El domingo por la mañana fuimos a casa de mis abuelos Pepi y Miguel, mis padres fueron al cine mientras yo me quedé con ellos que me dieron un paseo, porque hoy también hacía muy buen tiempo. Me llevaron a un parque donde había muchos niños jugando. Pasé muy buen rato con ellos y me compraron unas gafas de sol, qué divertido llevar gafas. Volvimos a casa de los abuelitos y allí comí y dormí la siesta pero desperté muy pronto y ya estaban de vuelta mis padres, con los que me fui a casa porque papá quería ver un partido del Málaga que daban en la televisión. Tenerife 1 - Malaga CF 1.

Cuando el partido terminaba fueron llegando tita Rosi y Chiqui, Mª José y Francisco, el abuelo Felipe, Cristina y David. Todos en casa nos lo pasamos muy bien. Jugaba el Atl de Madrid 0 - Real Madrid 2; dos partidos uno detrás del otro. Papá se lo pasó en grande, bueno y todos, porque había mucho merengue en mi casa. ¡Qué buen fin de semana!

En el tobogán

Cuando comienza un día no puedo imaginar lo que me viene encima. Cada día es distinto al anterior. El sábado por la mañana, por ejemplo, me desperté más tarde de lo normal ya que no tenía guardería y me vino muy bien porque necesitaba descansar del día anterior que me dejó exhausta. Después de desayunar vino tita Rosi a visitarme, estuvimos jugando un rato que se me hizo corto.

Papi no estaba durante la mañana porque había ido al baratillo con tito Francisco y con tito David. Mami y yo estábamos preparadas para irnos al parque en cuanto papi llegase, y así fue. Nos fuimos a un parque que hay a mi medida en el paseo marítimo, hacía un tiempo maravilloso. Me divertí de lo lindo subiendo y tirándome por el tobogán, jugué hasta que ya no me importó irme. Nos fuimos los tres a almorzar a un sitio que se llama Matahambre. Yo ya lo conocía de la semana pasada, pero pedimos de comer cosas distintas. Probé un pinchito de cordero, cuscús y algunas cosillas más. Desde allí nos fuimos a El Corte Inglés, donde teníamos que hacer unas cosillas.

El Corte Inglés me gusta. Allí hay una zona recreativa para mí, hay sillas a mi medida, muchs cosas que coger y tocar, veo los peces y un montón de cosas más. Desde allí de vuelta a la casa, a terminar el día poco a poco, juego un poco, me baño, juego otro poco, ceno, juego otro poquito y a dormir...

El sitio más cómodo del mundo

El viernes después de la guardería fuimos a comer a casa, mi mami y yo fuimos a comprar un pollo asado en un sitio cerca de la casa mientras papi aparcaba. Cuando llegamos fui a la cuna directa. Casi dos horas de siesta me di. Cuando desperté, estaba con muchas energía y nos fuimos a casa de los abuelos Pepa y Felipe, allí había muchísima gente pero sobre todo mis titos Mª José, Francisco, Cristina y David, además de mis abuelitos. Mis padres fueron al cine y yo me quedé un buen rato jugando con todos. Estando jugando como una loca, os podéis imaginar, me caí y me di un golpe en el labio que me hizo algo de sangre pero no lloré siquiera. Cada día soy más fuerte ya casi como mamá. Bueno todavía me falta mucho.

Me bañaron los abuelos en su casa y me dieron de comer y después el biberón, pero estaba tan descansada que lejos de dormirme tenía ganas de juego, y eso hicimos hasta que mi papis vinieron a recogerme después de cenar ellos, ya era de noche, y yo tendría que estar dormida pero como había dormido mucha siesta y me lo estaba pasando tan bien pues no tenía ganas. De todas formas cuando me siento en mi sillita del coche, que debe ser unos de los sitios más cómodos del mundo, por lo menos para mí, porque una vez allí sólo duro tres curvas a lo sumo cuatro. Y muchísimas veces allí acaba mi día...

Trampas inocentes

El jueves pasé un día super divertido con mami. Desde que mis padres me recogieron en la guardería hasta que me dormí lo pasé todo el día con ella. Papi me durmió a la hora de la siesta, pero desde que desperté hasta otra vez la hora de dormir todo el rato con mami. Mi mami es profesora, por eso tiene una vocación muy grande a enseñarme cosas. Me ha enseñado a decir mi nombre y apellidos, así como a contar hasta diez. Papi me ha enseñado otras palabras como parking, timbre, ... y algunas más pero mami tiene mucha paciencia conmigo. Gracias Mami.

Me encanta verme en el vídeo que colgamos en este blog el día después de Reyes. Todo el rato quiero que me lo pongan en el ordenador. Ya casi me lo estoy aprendiendo de memoria, digo las cosas antes de que ocurran.

Últimamente estoy también aprendiendo a hacer pequeñas trampas, inocentes diría yo, pondré un ejemplo para que os hagáis una idea. Como sabéis me encanta dormir con mis papis en la cama, así que algunos días cuando estoy por la noche durmiendo en la cuna y me despierto, pongamos que a las 6 de la mañana, mi mayor intención es que mis padres me saquen de la cuna y me lleven a la cama, entonces les llamo y les digo que quiero la cama a lo que me responden desde allí que me duerma, lo que yo quiero es que mi padres vengan, para que me saquen pero yo los llamo, y ellos me dicen que me duerma una y otra vez, entonces se me ocurre tirar el chupete y digo que se me ha caído. Vienen y me lo dan y se van, pero seguidamente vuelvo a tirarlo, diciendo que se me ha caído pero ya no vienen y dicen que me duerma, cuando veo que no funciona paso a la segunda fase diciendo que quiero agua, lo digo lloriqueando, y cuando vuelven y me ofrecen agua yo les digo que quiero cama y no agua. Entonces me dan el chupete y se van pero como lo tire otra vez ya no vienen ni tampoco si pido agua. Creo que empiezan a sospechar que les engaño. Son más listos de lo que parecen.

La siesta en "mi cuna la otra"

Mis padres están un poco preocupados porque al recogerme el miércoles en la guardería, mi señorita Mari Palma les ha dicho que he tenido mocos, he hecho diarrea y además he vomitado una vez. A mis padres les ha parecido muy raro, porque yo estaba muy contenta. Y es verdad. Desde la guardería nos fuimos directamente a casa de los abuelos Pepi y Miguel, que aunque sigue malito del ojo ya está mucho mejor. Casi curado. Mis padres no comieron ni nada. Se fueron rápidamente a una prueba médica que mi padre tenía que hacerse.

En casa de los abuelos me divertí mucho jugando con los juguetes míos y de mi primita Natalia. Pero al cabo de un rato tenía un sueño que no veas y me durmió la abuela Pepi, me puso en "mi cuna la otra". En realidad, me senté junto a ella viendo un programa de animales y así me quedé dormida.

Cuando desperté de la siesta ya estaban mis padres de vuelta para recogerme. Nos fuimos a casa. Papi tenía muy mala cara, por lo visto la prueba es bastante desagradable pero mami estaba reluciente como casi siempre.

Jugué con mi mami hasta la hora de cenar y finalmente a dormir.

Durante toda la tarde no tuve ningún problema. Ni vomitos, ni diarrea ni nada. Bueno sí, un poco de mocos.

Jugando con las titas

El martes después de la guardería nos fuimos los tres juntos a casa de los abuelos Pepa y Felipe, allí estaba tita Cristina, ya bastante recuperada. Poco después llegó tita Rosi. Todos comieron la rica comida de la abuela Pepa; sobre todo papi, que le encanta.

Después de que comieran jugué con mis titas un buen rato, con los colores, en el ordenador viendo a los Lunnis y así hasta que mami, esta vez fue ella, me acurrucó entre sus brazos y me quedé dormida. Cuando desperté mami se había ido a trabajar, y sólo estábamos la abuela Pepa y yo. Me gusta jugar con la abuela Pepa.

Mami vino por mí después de trabajar y fuimos a hacer la compra juntas al Mercadona, donde esperamos a que papi nos recogiese después de trabajar. Papi tenía mucha prisa porque había quedado con tito David, tito Francisco y con Pepe para ir a jugar al pádel. Así que en cuanto llegamos a casa se cambió y se fue. Yo me quedé con mami y con Luba, que estaba allí cuando llegamos, había estado limpiando toda la tarde. Mami me dio de cenar, el biberón, me bañó y jugó conmigo hasta que vinieron papá y tito David que estuvo muy poquito tiempo, pero aún así me dio tiempo a reírme con él. Desde ese momento me pusieron en la cuna a dormir y aunque protesté me quedé dormida más bien rápido.

Jugando al pillar

El lunes empezó regular porque tuve que ir a la guardería y, la verdad, no tenía nada de ganas. Además estaba lloviendo, lo que significa que no saldremos al patio, lo cual lo hace aún peor. En fin. Cosas que tiene ser ya mayor. De la guardería nos fuimos a casa de los abuelos Pepi y Miguel, comimos allí, bueno yo lo hice en la guardería. Me quedé toda la tarde jugando con los abuelos porque tanto papi como mami tenían que trabajar por la tarde. A media tarde, mientras yo dormía la siesta llegó mi prima Natalia. En cuanto la escuché pegué un salto en la cuna.

Con la prima tengo asegurada la diversión, jugamos al escondite. Yo cuento: 3, 5, 1 , 3, 6. Y seguidamente digo: voy. Pero lo que más me gusta es jugar al pillar. ¡Jo que divertido! Me lo estaba pasando tan bien que cuando sonó el timbre y vi que eran mis padres no me hizo ninguna gracia. Empecé a gritar: no quiero, yo aquí, no quiero casa. Pero normalmente no hay nada que hacer, mis padres no me hacen caso y nos fuimos.

En la casa estaban todos mis juguetes esperándome para jugar. Después de un rato tocó el baño, el biberón y a dormir, pero ayer mientras papi y yo veíamos los resúmenes deportivos sonó el teléfono. Papi se tuvo que ir corriendo porque el abuelo Miguel se puso malito. Tenía un ojo muy muy hinchado. Así que fueron al hospital. Yo me quedé con mami que me lo contó todo. Yo le preguntaba: ¿la abuela Pepi malita también? Y me dijo que no. Menos mal, pensé yo, porque si no quién iba a cuidar del abuelito.

Además tita Cristina también está malita, la pobre. Parece que ya está recuperando, veremos. Ánimo. ¡Recupérate pronto abuelito! ¡Recupérate pronto Cristina! Luego me dormí y no sé que pasó más.

La paella

El domingo fue un día de mucho trabajo. Nos levantamos demasiado tempranito para ser domingo, pero es que yo tengo la misma hambre los martes que los domingos. Nos pusimos manos a la obra para desmontar la Navidad de casa. Ya no tenemos árbol de Navidad, ni Nacimiento, ni adornos ni nada. Pero dice mami que el año que viene otra vez. Yo no quería, pero no tengo todavía mucho voto. Bajé con papi unas cuantas veces a guardar muchas cosas al trastero, mientras mami se puso a hacer una riquísima paella, pero antes me dio la comidita. Dormirme para la siesta fue cosa de papi que me engaña siempre.

Cuando desperté estaban en casa tita Rosi y tito Chiqui que vinieron a recoger una cosilla, pero como mami hizo más paella de la cuenta se quedaron a comer, para no tirarla. Jugué un buen rato con ellos mientras mis padres se arreglaban para irse a la calle. Tita Rosi me vistió a mí. Nos fuimos a casa de los abuelos Pepi y Miguel. Estaba Natalia allí. !Jó, como juego con la prima¡. Papi y mami aprovecharon y fueron al cine.

Vinieron pronto a por mí y volvimos a casa. Mi primita Natalia no quería que me fuese y yo no quería irme, pero todavía tenía de bañarme y cenar. No hubo más remedio. Después viendo el partido del plus, me quedé dormida.

El testigo

El sábado desayuné en casa de los abuelos Pepa y Felipe, pues había dormido allí. Esta vez no vinieron mis padres a por mí ya que los abuelos tenían que salir y me acercaron a la casa ellos. Gracias abuelitos.

Poco después bajamos todos juntos al centro de Fuengirola. Papi se compró unos zapatos en las rebajas y echó la quiniela de fútbol a ver si tiene suerte. Después fuimos a un sitio nuevo que yo no había estado nunca, un parque junto al mar, me lo pasé pipa. Por primera vez me subí yo sola a un tobogán y me tiré. Una vez que lo aprendí me tiré muchas veces más. Ya no quería parar.

Comimos en un Restaurante allí cerca, que se llama Matahambre, todo debía estar muy bueno porque no sobró nada. Aunque estando mi padre en la mesa es fácil que ocurra. Vinieron a comer con nosotros tita Cristina y tito David, además entrando allí nos encontramos con Marian y Osorio. ¡Qué felices! Después de comer le enseñé a todos lo bien que me subo al tobogán y me tiro. Paseamos por el precioso paseo marítimo, nos tomamos unos helados, que invitaron Marian y Osorio. Pero era hora de irse a casa. Papá estaba muy contento porque aceptó gustosamente la invitación que Osorio le hizo de ser testigo de su próximo enlace.

Papi vio el fútbol en casa mientras yo jugaba con mami. Por la noche caí agotada. Fue un día muy intenso.

Boda a la vista

El viernes por la tarde, después de pasar la mañana jugando en la guardería, fui con mami y tita Cristina a ver un bebé pequeñito, recién nacida, que se llama Natalia, como mi prima. Aunque yo realmente con quien jugué, y mucho, fue con su hermano Pablo, que aunque es un poco mayor que yo le gusta jugar conmigo. También estuvieron Mª José y su niña Blanca, también muy pequeñita. Desde allí fuimos a casa de los abuelos Pepa y Felipe, porque mis padres iban a ir a Rigodón. El plan era volver a por mí tempranito, pero no lo hicieron porque a mi mami le dio un mareo grande, y se puso muy malita, otra vez su problema de oído -después de 7 meses-. Así que para que pudiera descansar tranquila me quedé a dormir en mi "otra cuna", que es una que tengo en casa de los abuelos Pepa y Felipe. Así que pase la noche allí. Que tampoco está mal.

Pero la buena noticia del día es que Marian y Osorio se van a casar el próximo día sábado, 4 de Octubre de 2008. Esperemos que sea un día con muy buen tiempo. Os deseo desde aquí muy buena suerte.

Natalia en sus clases de ballet

Buff, tengo mucho que contar, veamos por donde empezar: el jueves fui, como todos los días, a la guardería, pasé un buen rato jugando con "Sofía la otra", que es una amiguita mía de la guardería. Desde allí nos fuimos en coche para casita y nada más llegar me eché unas siestecilla mientras mis papis almorzaban, pero me despertaron muy pronto porque mami tenía que ir al dentista, creo que no le hace mucha gracia ir, así que nos bajamos con papi cuando se fue para trabajar.

Antes del dentista mami y yo fuimos a comprar un regalito a Zara y allí nos encontramos con la abuela Pepi y la tita Ana, qué sorpresa me llevé cuando las vi allí. Después nos fuimos a la Casa de la Cultura a recoger a Natalia de sus clases de ballet (qué guapa estaba con su tutú y qué bien bailaban todas las niñas, cuando sea más grande a lo mejor me apunto yo también).

Cuando bajamos me llevé otra sorpresa, el abuelo Miguel estaba abajo esperándonos (él también se llevó una sorpresa, porque no sabía que yo estaba allí). De allí nos tuvimos que ir rápido porque ya era casi la hora del dentista. Mami me llevó a casa de abuela Pepa, donde estuve jugando mucho con mi primo segundo Dieguito; también vino tita Rosi a verme y estuve un ratito jugando con ella. Luego me recogió mami y nos fuimos a por papá y de ahí directos a la casita a descansar, porque vaya día más ajetreado...

Volviendo a cabalgar

Como podéis ver, vuelvo a las andadas. El hombre no aprende nunca. Y aunque dudo que sea el único animal que tropieza en la misma piedra cientos de veces, por lo menos en mi caso. Aquí estoy.

Hace tiempo que no paro de darle vueltas a la cabeza intentando averiguar cómo solucionar los problemas que con anterioridad tuve en el blog. Buscando y buscando he encontrado unos 6 ó 7 problemillas, o digamos, cosillas mejorables. De los que sólo he sabido solucionar uno de ellos, pero quizá sea suficiente. He estado investigando por aquí y por allá, y todo se puede resumir en una famosa frase: Lo importante nos son las veces que te caes sino cuantas te levantas. Y en eso estamos.

Cuando empieza el año, uno promete hacer cosas como: hacer deporte, comer sano, no enfadarse por tonterías, reír más, volver a tocar la guitarra, tener más paciencia, disfrutar de mi familia, leer más, no pasar tanto tiempo delante del ordenador, mejorar el blog -éstas incompatibles,- y un largo etcétera... así que espero ansioso que me digáis si podéis o no podéis ver los cambios. Porque el vídeo supongo que sí lo habéis visto todos. ¿Podéis ver las fotos?

Gracias por seguir ahí.

¡Feliz Cumpleaños Madrina!

Hoy es el cumpleaños de mi guapísima madrina Mª Carmen. Espero que el padrino se porte bien con ella y le haga un buen regalo como se merece. Desde aquí le deseamos mi mami, papi y yo que haya pasado un día lindo, a pesar de no ser fiesta y haber tenido que trabajar. Un beso madrina. ¡Muac!

¡Y que cumplas muchos más!

Esperando a papá

Vaya nochecita que les hice pasar a mis padres. Se han empeñado en que duerma en la cuna y a mí lo que me gusta realmente es dormir entre ellos en la cama. ¿Por qué estar sola en la cuna cuando puedo estar acompañada con ellos? No nos ponemos de acuerdo, ellos quieren una cosa y yo otra. Veremos como acaba la cosa. Por lo demás no mucho que contar. Todavía sigo descubriendo cosa de mis nuevos juguetes. He visto el dvd de los Lunnis, pero por la cuarta o quinta canción ya estoy harta y quiero hacer otra cosa. También me he dado cuenta de que la cocinita tiene pegatinas y estoy intentando arrancarlas. Pero no he podido nada más que arrancar una.

Ayer vi a mis abuelos Pepi y Miguel que vinieron a recogerme a la guardería para pasar un rato conmigo hasta que llegaron mis padres. También vi a Luba que estuvo limpiando en casa toda la tarde; a Francisco que estuvo un rato muy pequeño justo antes de irse con papi a jugar al pádel y después vinieron los abuelos Pepa y Felipe a casa. Al final llegó papi, al que yo tanto esperaba para que me durmiera, y así fue.

Hace un año mi equipo era...

Hoy coloco aquí una foto mía de hace un año. Era enero de 2007. Por entonces, todavía no tenía casi pelo, y andaba regular, pero era muy feliz. Ahora el Málaga, que es el club de mis amores, va el primero de segunda división y papi dice que si todo sigue más o menos normal va a subir a primera. Repito si no pasa nada. No hay que lanzar las campanas al vuelo. De todas formas mi foto es de hace un año cuando el Málaga estaba pasándolo muy mal, se hablaba de desaparición, de descenso, pero mi papi y yo siempre fuimos optimistas. Aúpa el Málaga Club de Fútbol. Muac.

De vuelta a la guardería

Otra vez de vuelta a la guardería. Por más que les digo a mis padres que me quiero quedar en casa jugando con mis juguetes nuevos. No hay manera. Son inflexibles. Así que me vi otra vez jugando con un montón de amiguitos en la guardería. La verdad. No está nada mal.

El resto del día fue bastante bueno. Primero una siesta, luego jugar, más tarde la merienda, vuelta a jugar. Luego un baño. Llega papá. Jugar un ratito. Biberón y a dormir. Cada día es distinto pero a su vez parecido. Ya voy controlando la situación un poco más.

Estoy aprendiendo cosas nuevas, ya digo mi nombre y apellidos, sé los colores muy bien. Conozco la casa de cabo a rabo. Papá me dice: ve al dormitorio de papá y trae las zapatillas y yo lo hago. Me gusta jugar con papi.

Jugando con los juguetes nuevos

El lunes también fue un día bastante intenso. Me desperté con mucha hambre, pues era algo más tarde de lo normal, ya que el día de Reyes no paré ni un segundo y me acosté algo más tarde y estaba cansadísima. Después de desayunar un biberón entero ya tenía energía para seguir jugando un buen rato. Mami se fue a las rebajas bastante pronto y nos quedamos papi y yo cocinando con mi cocinita nueva y cuidando de los dos bebés que ahora tengo a cargo.

Cuando mami volvió ya era la hora de comer. Comimos y me fui con papi a las rebajas. Nada de siesta otra vez. Mami se quedó en la casa planchando y haciendo cosas de la casa. Cuando volvimos de las rebajas jugué otro rato hasta la hora del baño. Después todo fue muy rápido. Me vistieron, me dieron el biberón y me dormí...

Feliz cumpleaños Pepe

Hoy quiero felicitar desde mi blog a Pepe que es compañero tanto en el trabajo como en el pádel de mi papi, además de mi fotógrafo oficial.

¡Que cumplas muchos más y que te traigan muchos regalos! ¡¡Feliz cumpleaños!!

Me encantan los Reyes Magos

El día de Reyes es el día más increíble del año. Nada más despertarme, mientras mami me dio el biberón, papi fue a comprar rosco de Navidad, mis padres me dieron muchos regalos, a ver si me acuerdo de todo: un ordenador para niños, ceras de colores, un arca de Noé, una rebeca, un estuche para meter las ceras, un bolsito, una libreta de Piolín y un libro de cuentos. Justo cuando nos íbamos llegaron tita Rosi y tito Chiqui, que me trajeron un pupitre de los Lunnis, que además tiene una silla y una pizarra y muchos colores y letras, es muy divertido. Pero nos tuvimos que ir corriendo a casa de Blanca y Nacho porque nos habían dejado los Reyes Magos dos regalos para ellos. A Nacho le trajeron una moto azul grande, que casi no cabe en el coche de papi, y a Blanca una muñeca Bratz con accesorios de peluquería.

Seguidamente fuimos a casa de los abuelos Pepa y Felipe, allí también había varios regalos para mí. Había una bicicleta azul y rosa muy chula y un bebé que le dejaron a mi tía-abuela Paqui que se llama Sophie. Espero jugar mucho con todo. Cuando estábamos saliendo llegaron tita Mª José y tito Francisco que me trajeron a su casa los Reyes Magos una cocinita muy grande y que tiene muchas cosas, desde huevos, salchichas, ollas... ¡me encanta!

Desde allí fuimos a comer al restaurante Ku'dam con las abuelos Pepi y Miguel mis padrinos Mª Carmen y José, los titos Ana y Paco, Natalia mis padres y yo. Comimos muy bien todos allí y nos fuimos a tomarnos el postre a casa de los abuelos. Allí había regalos por todas partes. Un carrito con un bebé para pasearlo por la casa, un muñeco que por un lado duerme y por otro está despierto y cuando lo abrazo se ilumina; una silla de madera de Winnie de Pooh y algunas cosas más. Allí jugamos un buen rato.

Cojimos todos los regalos y nos fuimos a la casa, allí fueron llegando los abuelos Pepa y Felipe, los titos Mª José,Francisco, Rosi, Chiqui, Cristina y David que también le habían dejado los Reyes Magos una maletita de Los Lunnis que tiene música y vídeos y unas zapatillas Converse All Star super chulas. Allí todos vieron el Real Madrid 2 - Zaragoza 0, mientras yo jugaba.

Seguramente se me olvida algún regalo, pero es que son tantos que no puedo acordarme. Después me dormí fácilmente en los brazos de papi. Estaba agotada.

Viendo llegar a los Reyes Magos

El sábado también fue muy intenso. Me desperté y papi ya se había ido al baratillo, fue solo porque tito Francisco no pudo ir. Yo, en cambio, me quedé en casa jugando con mami y con algunos de mis juguetes hasta la hora de comer. Papi y mami comieron a toda prisa y no querían que me durmiese porque íbamos a ver llegar a los Reyes Magos en helicóptero, fuimos corriendo para no llegar tarde y lo conseguimos. Lo vimos aterrizar, me encantó ver el helicóptero. Cuanto ruido. Papi me preguntó si yo me quería montar en él, pero no fue posible, había tanta gente que no pudimos.

Los Reyes Magos llegaron y les esperaron muchos pajes vestidos con ropas muy extrañas. Nos acercamos tanto a los Reyes que le di un beso al Rey Gaspar, que se parecía un poco al abuelo Miguel, pero con mucho pelo barba. Luego allí nos encontramos con tita Ana, tito Paco, Natalia y la abuela Pepi, además de cientos de niños. Nos fuimos todos juntos a casa de la abuela Pepi a tomar café. Yo me lo pasé pipa jugando con Natalia, aunque al momento nos fuimos a ver la cabalgata pero yo en cuanto me monté en el carro me quedé dormida. Y cuando me desperté estaba en la casa.

La siesta me vino muy bien pero como fue un poco tarde después del baño y biberón no me quería dormir, pero al final, como siempre me dormí.

Con Alex en casa

¡Jolín! Hemos estados tan ocupados mis padres y yo el fin de semana que no hemos podido sacar unos minutos para escribir en el blog. El viernes me desperté más tardecito de lo normal y mami y yo fuimos a hacer unas comprillas que todavía faltaban por hacer. Después fuimos a recoger a papi a la salida del trabajo, y me llevaron a casa de los abuelos Pepi y Miguel, donde pasé la tarde entera con la prima Natalia que llegó algo más tarde. Luego vino a recogerme Mami y como no había dormido la siesta, me dormí en el coche camino a la casa. Cuando llegué a casa dormida mi papi me despertó y estaba allí con él su amigo Alex. Me gusta mucho jugar con él. Alex se quedó a cenar con nosotros y justo después, empezamos a ver una película, pero no pude más y me quedé dormida.

Un mueble nuevo en el lavadero

Como mami tenía que ir al dentista, nos levantamos tempranito y nos fuimos con papá en el coche. Estaba lloviendo y había mucho viento, pero fue divertido. Mientras mami fue al dentista, yo fui a casa de la abuela Pepa. Jugué un rato con ella y con tita Rosi que vino a verme. Me lo pasé muy bien. Mami volvió y nos fuimos a recoger a papi a la puerta del trabajo.

Como yo había comido en casa de la abuela, dejé a mis padres comer tranquilos y me fui a jugar con mi juguete-champiñón nuevo. Cuando terminaron de comer me llevaron a la cuna. Y eché una siestecita. Cuando desperté estaba tito Paco haciendo dos muebles nuevos en el lavadero. Han quedado muy bonitos, pero uno es tan alto que no puedo meterle mano. Qué pena.

Más tarde vino la abuela Pepa y tita Rosi, porque venían a visitar a Gonzalo, pero pasaron a recogernos a mami y a mi y fuimos las cuatro juntas. Gonzalo esta más grande y más bonito. Me gusta mucho. En cuanto papi volvió del trabajo le dije que había visto a Gonzalo y que era chiquitito y bonito. Después estuve jugando con papi un rato hasta que llegó el momento del baño, la cena y a dormir...

Comiendo guisantes del chino

Ayer fue un día muy tranquilito. Desperté más tarde de lo habitual, porque ni mami ni yo teníamos colegio. Pasé la mañana jugando con mis juguetes, y correteando por la casa, hablando como un loro. Le dije a mami que quería a Harry Potter en la tele. Se ríe mucho cuando digo cosas así. Cuando llegó papi jugué un poquito con él y seguidamente a la cuna a dormir la siesta.

Por la tarde vino Luba a ayudar a mami a limpiar y por la noche vinieron tita Cristina y tito David. Cenamos comida que trajo un hombre chino mientras vimos en la tele el Racing 2 - Málaga 0. Jugué mucho con todos y comí patatas de gambas y muchos guisantes. ¡Me encantan! Después empezamos a ver una película pero aunque puse mucha resistencia, me llevaron a la cuna para que me durmiese y al final caí.

Feliz 2008 a todos

No tenía yo ni idea de lo divertido que podría ser la entrada de un año. Me lo pasé genial. Por la mañana estuve en casa de la abuela Pepi y el abuelo Miguel mientras mis padres fueron a hacer alguna que otra compra navideña. Espero que se acuerden de mí, aunque ellos dicen que a mí me regalará los Reyes Magos de Oriente, o sea, chinos. Pero sólo si me porto bien.

En casa de mis abuelos me eché hasta una siestecita. Cuando me desperté vino mi madre a recogerme. Papi se fue a la casa. Mami y yo fuimos a casa de los padrinos de mamá -Trini y Pepe- a ayudar a preparar la gran comilona de fin de año.

Después de ayudar muchísimo volvimos a casa a prepararnos para volver bien guapos. Mami estaba, como siempre guapísima. Llegamos un poquitín tarde, pero es que encontrar aparcamiento era muy complicado. Tuvimos que aparcar en un aparcamiento público. Nos reunimos un buen montón de gente. A ver si me acuerdo: Pepe, Trini, Nieves, Mariano, María José, Alberto, Blanca, Nacho, Loli, Pedro, Pepa, Felipe, Cristina, David, María José, Francisco, Rosi, Chiqui, mamá, papá y yo.

Lo mejor fue cuando llegó el momento de las uvas, todos apretados delante de la tele para comernos las uvas, hasta yo lo hice, lo que pasa es que como no sé contar bien creo que me hice un lío y me tomé la cuatro por la primera, la sexta por la quinta y llegué a doce. ¡Bieeeen!.

Después repartimos muchos regalos del amigo "invisible". A mí me trajeron un regalo muy chulo: un pequeño champiñón de juguete donde puedo meter figuritas por sus ranuras, para aprender y tiene una puerta por donde coger las cosas y luces... ¡me encanta! No es exactamente igual que el de la foto pero el mío es mejor. Me lo pasé pipa jugando con Nacho, pero principalmente con David, le encanta jugar conmigo y a mí más con él. Todos jugaron al Bingo y al dinero. El campeón absoluto fue Papá que ganó dos bingos de cuatro. Y esto no es una inocentada. Le vino muy bien ganar para pagar el aparcamiento del coche. Estuvimos hasta las 3:30 de la mañana todos jugando, y yo no me dormí, pero en el carrito de camino al coche, me quedé sopa...