miércoles, 20 de enero de 2010

Dormir tranquila

Últimamente estoy fatal, quiero decir que voy de una a otra, es decir, que todo me pasa a mí. Cuando voy corriendo, en lo más llano, sin ningún obstáculo, totalmente confiada y decidida. Pum. Tropiezo con no se sabe cómo y me caigo. Si mi madre me pone una rebeca nueva, a estrenar, y mi hermano está tomando, pongamos, una papilla, entonces, n0 se sabe cómo. Plaf. Una mancha nueva. Si estoy jugando en el patio del colegio, con mis amiguitas, a cualquier cosa y una de ellas levanta la mano sin mirar. Ras. Arañazo en mi cara.

Eso fue lo que me pasó ayer, que mientras jugaba mi amiguita me arañó, sin querer, pero me salió hasta sangre. Ahora tengo una herida en mi mejilla, pero Papi dice que si la sigo teniendo cuando llegue el Carnaval me va a disfrazar de pirata. Pero no sé, a mí me gusta más vestirme de princesa.

Por si todo esto fuese poco ahora arrastro una tos pegajosa que no me deja dormir tranquila. Lo peor es que tengo un poco de fiebre y, desde hoy Miguel también, pero él no tiene tos. Pensamos que serán los múltiples dientes que le están saliendo.

No hay comentarios: