viernes, 9 de julio de 2010

En la fuente

¡Jo, qué bien lo pasamos el miércoles! Jugaba España un partido muy importante cerca del final del juego del mundial contra otro país que se llama Alemania, era un partido muy emocionante y difícil, sobre todo viendo lo contento que se puso todo el mundo después de la victoria.

Lo vimos en casa de tita Rosi y tito Chiqui, en una tele muy grande que tiene en el salón. Estábamos Rosi, Chiqui, Daniel, tito Francisco, mamá, papá, Miguelito y yo. ¡Nos hinchamos de comer! Papá le dio muchas visitas a un puré de aguacate que decía que le gustaba mucho.

Cuando España marcó todos locos de contentos y papá como es costumbre nos reboleó hacia arriba a mi hermano y a mí. ¡Hasta tocar el techo! Pero lo más divertido estaba por venir.

Nos montamos en el coche, bajamos hasta el centro, donde nos esperaban los abuelos Pepi y Miguel, y con la bandera de España atada a mi cuello, como si fuese una capa, nos fuimos a festejar la victoria a la fuente principal. ¡Cuánta gente! ¡Cuánta diversión! Me monté en los hombros de papá y nos paseamos por alrededor de la fuente, mientras la gente saltaba y echaba agua hacia afuera. Todo el mundo pintado de rojo y amarillo.

Miguel estaba un poco asustado de tantos petardos y de tanta gente, pero no lloraba, sólo se abrazaba fuerte, pero a la hora de irse no se quería ir. ¡Valiente asustón!

Os cuelgo una foto de cuando yo era una pepona de solamente tres meses.


1 comentario:

Mamá dijo...

¡Mi pepona preciosa!