miércoles, 15 de abril de 2009

Medio mundo

Eran alrededor de las 2:40 de la madrugada, entre dos días laborables, cuando desde mi cama grité: papáaaa veeen. Lo tuve que repetir cuatro o cinco veces antes de que mi padre apareciese por la puerta de mi dormitorio.

- ¿Qué te pasa? me preguntó.
- Quiero que venga Natalia a jugar a la casa, le contesté. A mi padre se le cambió la cara.
- Natalia estará durmiendo, igual que medio mundo. ¡Así que duérmete!

Salió de mi cuarto sin apagar la luz, se fue hacia la cocina, escuché como abrió la despensa que hay junto al frigorífico y volvió con una de mis botellas de agua para sustituir la que estaba vacía en mi mesita de noche. Me dio un beso y me repitió que me durmiese. Pero antes de irse le pregunté: ¿Papi, qué hace el otro medio mundo que no duerme?

1 comentario:

Tito David dijo...

Hola Sofía:

Seguro que como tu padre, me he quedado asombrado con la pregunta... que gran intuición, curiosidad e inteligencia has demostrado... sin duda, vas a ser una niña muy lista... Gracias por ser como eres, bonita!!!