Dentro de la taza

Estoy aprendiendo a hacer pipí en el váter, pues ya tengo 2 añitos y aunque parece fácil, no os creáis que es tarea sencilla. Para empezar yo necesito ayuda para subirme al váter, aunque lo más difícil para mí es acordarme justo a tiempo. La mayoría de las veces cuando estoy jugando y pasándomelo pipa me entran ganas de hacer pipí, y claro, inconscientemente me dejo ir, pero cuando termino y noto el pipí, entonces me acuerdo y le digo a mis padres que me pongan en el váter, pero ya no hay manera. Lo hecho, hecho está.

Aun así estoy luchando contra mi inconsciente al mismo tiempo que intento controlar el esfínter de manera que consiga llevarme, por fin, la gominola con la que mis padres me premian cuando finalmente, y tras mucho esfuerzo, mancho la taza blanca con mi amarillento pipí.