sábado, 8 de marzo de 2008

No me gustan los burros...

El sábado por la mañana mis padres y yo subimos a Mijas. Allí trabaja mi padrino. A mis padres y a mí nos gusta ir a visitarlo de vez en cuando, así desayunamos con él y le hacemos la mañana de trabajo más llevadera. Después de desayunar le enseñamos el coche nuevo, que aún no lo había visto. Le gustó casi tanto como a mí me gustó el libro-musical que el padrino me regaló, además de un huevo Kinder y Lacasitos. Qué guay mi padrino.

Después le dejamos trabajar y fuimos al parque que hay muy cerquita, allí disfruté jugando sobretodo en el tobogán y en los columpios. Vimos muchísimas palomas tras las que corrí hasta no poder más. Después nos sentamos en la Plaza de la Constitución porque hacía un día espléndido a tomarnos un refresco. ¡Qué buen descanso!. En el camino de vuelta al coche -menos mal que en este sentido es cuesta abajo- vimos un montón de burros. ¡Estaban aparcados! Papi los tocó, les tocaba las orejas suavemente, pero yo no fui capaz. No me gustan mucho los burros. Mami dice que tengo buen gusto.

Bajamos hacia Fuengirola en el coche nuevo, con las curvitas de un lado para otro, con la música y no sé cómo, me desperté en un bar cerca del mercado del Boquetillo tomando boquerones fritos que por lo visto se le habían antojado a mami. ¡Es que está embarazada!

Volvimos a la casa y allí pasamos el resto del día, descansando de tanto ajetreo.

En el vídeo puede verse lo buena que soy en el columpio.

1 comentario:

Unknown dijo...

Hola Sofía!!!

Jajajajaja... qué graciosa y mona estás en el columpio!!! Veo que tuviste un sábado muy entretenido y divertido, eso está bien, ahora que llega el buen tiempo seguro que vas a poder aprocvechar para jugar mucho en los parques, con los primos y tios,...

espero que sigas mucho tiempo con esa eterna sonrisa.

Besos,

Tito David